¿Te gustaría comprar una casa o departamento, pero no tienes el pie o no cumples con los requisitos del banco? No te desanimes, hay una solución que te puede interesar: el arriendo con opción de compra.
Se trata de una modalidad que te permite arrendar una propiedad por un tiempo determinado, con la posibilidad de comprarla al finalizar el contrato, a un precio fijado de antemano. Así, puedes asegurar tu vivienda soñada, sin tener que preocuparte por la inflación, el aumento de tasas o la competencia de otros compradores.
¿Cómo funciona? Es muy simple: eliges una propiedad que te guste y que se adapte a tu presupuesto, firmas un contrato de arriendo con opción de compra con el dueño o la inmobiliaria, y pagas una mensualidad que incluye el arriendo y un ahorro para el pie. Al terminar el plazo, que puede ser de uno a cinco años, puedes ejercer tu opción de compra, usando el ahorro acumulado como pie y solicitando un crédito hipotecario por el saldo restante.
¿Qué ventajas tiene? Muchas. Por ejemplo, te permite acceder a una propiedad sin tener que ahorrar previamente el pie, te da la oportunidad de conocer la vivienda y el barrio antes de comprarla, te protege de las variaciones del mercado inmobiliario, y te facilita la obtención del crédito hipotecario, al demostrar tu capacidad de pago y tu historial crediticio.
¿A quién le conviene? A todas las personas que quieran comprar una propiedad, pero que por distintas razones no puedan hacerlo de forma inmediata. También a quienes busquen una alternativa flexible y segura, que les permita planificar su futuro con tranquilidad.
Si te interesa esta opción, no dudes en contactarnos.
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